El pan también se ve afectado por la inflación. Debido al aumento del coste del trigo, la harina se encarece en el mercado minorista. El sector del pan advierte de una tormenta perfecta que podría provocar un shock de precios en las cajas a partir del verano en España.
Escasez de suministros, desde el principio de la cadena
Seguramente ya habrás notado estantes vacíos o retrasos en las entregas de todo tipo de productos, desde camiones y papel higiénico hasta juguetes y teléfonos inteligentes. Incluso los supermercados, restaurantes y comedores escolares carecen de envíos.
¿Los motivos? Hay varias razones que se han unido en poco tiempo:
- La invasión de Ucrania por parte de Rusia, siendo el primero uno de los principales países exportadores de trigo y cereales
- La restricción de países productores como India, que frente a la alta demanda han optado por limitar las exportaciones de trigo a terceros países para cubrir primero su demanda nacional
- La escasez de mano de obra a lo largo de la cadena de suministro, el término abreviado para referirse a una serie de pasos que los productos realizan desde la granja y la fábrica hasta el comercio.
En especial, la guerra ha interrumpido la producción de trigo, avena y aceites de cocina en una nación considerada el «granero del mundo». Ucrania y Rusia producen el 25% del suministro mundial de trigo, pero la invasión rusa ha detenido gran parte de la producción. Esto, unido al aumento del coste del carburante para el transporte, están haciendo subir los costes de entrega, lo que está contribuyendo a la subida de precios prevista para este verano.
La subida será absorbida por los consumidores
Desgraciadamente, estos costes tienen que ser asumidos por los consumidores casi siempre, lo que hace que los más vulnerables de nuestra sociedad vayan a notar la subida de precios más que nadie.
- Las empresas y las panaderías o comercios minoristas, del mismo modo, han reducido sus previsiones de margen, como otros sectores, por ejemplo los prestamistas.
- Esto sirve para limitar en cierto modo las subidas previstas en el precio, lo que sin embargo contribuye a un empobrecimiento generalizado.
El sector se está apoyando en el gobierno y en la Unión Europea para que libere más tierras para el cultivo o bien garantice una entrada suficiente de materias primas como la harina, que afecta al pan pero también a muchos otros productos derivados. A corto plazo, están buscando ingredientes de reemplazo y buscando trigo y harina producidos fuera de Ucrania.
